En agosto de 2024, el presidente José Raúl Mulino se comprometió ante la población chiricana a rescatar las instalaciones del complejo médico de Bugaba, Dr. José Félix Espinosa Barroso, abandonado por administraciones anteriores. Transcurrido un año, este 27 de noviembre de 2025 se convierte en una fecha histórica, con la inauguración de las nuevas instalaciones que albergan un hospital de primer mundo.
La obra, que permaneció 13 años en abandono, representa un paso decisivo del gobierno del presidente Mulino para fortalecer los servicios de salud y prevención, en beneficio de más de 170 mil chiricanos directamente. Este hospital se convierte en un hito para la provincia, al contar con servicios como atención de urgencias, consulta externa, quirófanos y un edificio para salas de quimioterapia y hemodiálisis.
“Aquí tienen su hospital, aquí en Bugaba. Agradezco al pueblo del distrito que no bajó los brazos en exigir que se terminara y hoy está aquí para dicha y complacencia de todos”, remarcó el presidente Mulino.
El mandatario, quien estuvo acompañado de su esposa, Maricel Cohen de Mulino, ministros de Estado y directores de instituciones, añadió que este centro se convierte en el mejor hospital de la provincia, y solicitó a todos que lo cuiden porque llena un vacío en la prestación del servicio de salud para la zona.
Reiteró la solicitud al ministro de Salud, Fernando Boyd Galindo, y al director de la Caja de Seguro Social (CSS), Dino Mon, para culminar lo más rápido posible el proceso de integración de servicios en beneficio de toda la población.
“Es mandato de la Ley y una necesidad para resolver problemas y reducir gastos manejando un solo sistema de salud. No es posible tener dos instalaciones de salud frente a frente con duplicidad, no tiene sentido”, apuntó.
La culminación de este hospital da esperanza a esta población local. Pasó de ser paredes sucias, abandonadas y un interior lleno de árboles y vegetación a un verdadero centro de atención médica con 172 camas para hospitalización, 3 quirófanos y 27 consultorios médicos, que echa tierra a esos grandes sacrificios que por años tuvieron que padecer residentes del área que se movilizaban hasta el distrito de David para acudir a un hospital.
Con esta obra y una inversión de B/.89,300,000.00, se beneficia a unos 170 mil habitantes, que incluye la población directa de Bugaba (68,870) e indirecta de los distritos de Barú (56,307), Tierras Altas (23,525) y Renacimiento (22,429), que tendrán al alcance una atención médica modelo y unificada entre la CSS y el Minsa.
En este evento, donde también estuvo la niña Leah Kamila, primera paciente en recibir una cirugía cardiaca pediátrica a corazón abierto, en el nuevo Hospital Pediátrico de Alta Complejidad, de la Ciudad de la Salud, el ministro de Salud hizo un recuento de por lo menos 13 instalaciones médicas inauguradas en solo un año y, mientras listaba sus nombres, mencionó que, al momento de la apertura de este hospital, ya se había atendido a 4 pacientes, dando inicio a una nueva era de atención para los pobladores de los distritos cercanos.
Ester Lam, paciente de cáncer de mama, agradeció la obra y expresó su complacencia y la de su familia, porque ahora no tendrá que viajar hasta la provincia de Panamá para continuar sus tratamientos.
En el acto estuvo presente José Félix Espinosa, hijo del doctor José Félix Espinosa Barroso, familia donante del terreno donde se construyó esta obra que lleva su nombre. Además, la gobernadora de la provincia, Aixa Santamaría; autoridades locales y Ricardo Gardellini, de la empresa constructora RIGA.
Datos del Hospital General de Bugaba
Planta baja: consulta externa, laboratorio y banco de sangre; imagenología, urgencias, farmacia, morgue y patología; administración, docencia y las áreas de apoyo como lavandería, almacén y nutrición y dietética. Adicional están los edificios de talleres y zona industrial.
El nuevo edificio que albergará los servicios de quimioterapia y hemodiálisis contará con 15 sillones para el tratamiento de hemodiálisis y 15 sillones para quimioterapia, ambas con sus áreas complementarias específicas.
Planta alta: hospitalización pediátrica, medicina interna, ginecobstetricia y cirugía. También estará neonatología, unidad de cuidados intensivos, área quirúrgica y ginecobstetricia con 3 quirófanos modulares y 2 expulsivos modulares. En este piso se encuentra la capilla o sala de oración, residencia médica y oficinas de especialidades. Tiene 5 años de mantenimiento.